Pimienta Blanca

Para obtener pimienta blanca los frutos se recogen en etapa de madurez (granos rojizos), luego se pasan a un proceso de remojo en agua por una semana aproximadamente; a través de su frotamiento se elimina la parte externa del pericarpio “cáscara”, dejando secar el grano hasta que tome el color blanquesino característico de este tipo pimienta.

Tiene un sabor más aromático, suave y delicado que la negra. Este tipo de pimienta agrega un ligero sabor picante a las salsas y a las sopas, y se recomienda en la condimentación de carnes blancas. Contiene altos niveles de Calcio, Hierro y fibra.

Por sus propiedades ayuda a favorecer el tránsito intestinal, fortalecer los huesos, evitar la anemia, mejorar el control de la glucemia en personas con diabetes, reducir el colesterol, prevenir el cáncer de colon, combatir el alzhéimer. Se recomienda para personas que practican deportes intensos.

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